Las pasitas han sido desde hace mucho tiempo uno de los ingredientes predilectos en el mundo de la repostería debido a sus múltiples propiedades. No solo aportan una dulzura natural y un atractivo visual, sino que también actúan como un inhibidor natural de moho y agregan un sabor único a tus recetas.
A lo largo de la historia, diversas culturas han incluido pasitas en sus platos más emblemáticos. Ejemplos de esto son el Stollen de Alemania, los roles de canela en México, el Panettone de Italia, el Kretenbrood de Holanda, las Madeleines de Francia y los panes de Pascua de Checoslovaquia. Por ello, es fundamental conocer cómo aprovechar al máximo las pasitas en la repostería. Aquí te compartimos algunos consejos útiles:
Hornea a una temperatura menor que los panes convencionales. Los productos elaborados con pasas se benefician cuando se hornean a temperaturas más bajas que los panes convencionales. Reducir la temperatura del horno en unos 25 grados o más suele funcionar mejor. El vapor a baja presión en el horno también ayudará a evitar que las pasas se carbonicen.
Agrega las pasas al final del proceso de mezclaDurante el último minuto o dos del proceso de mezcla, añade las pasas. Esto ayudará a que la fruta permanezca intacta.
Evita la fermentación irregularEl exceso de azúcar y ácido en la masa, resultado de frutas trituradas, puede ser la causa principal de fermentación irregular. También, el exceso de canela puede afectar el pan. Por ello, es crucial mezclar las pasitas a una velocidad menor para mantener su integridad.
4. Evita un remojo excesivo de las pasitas Para mantener intacta la estructura de las pasas, evita remojarlas en exceso. Las pasas adecuadamente acondicionadas son esenciales para obtener productos horneados de calidad.
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